Plan de salida en las inversiones

Al hablar sobre la importancia de saber cuándo salir de las inversiones, nos encontramos con uno de los dilemas más complejos del mundo financiero. La habilidad para determinar el momento preciso para retirarse de una inversión, ya sea en acciones, bonos, bienes raíces o cualquier otro vehículo de inversión, es tanto un arte como una ciencia. Warren Buffet, con toda su experiencia acumulada, destaca el tercer paso de las inversiones: el retiro. Este paso no sólo implica reconocer los frutos de la estrategia implementada sino también saber preservarlos.

Por eso dicen que una cosa es saber hacer dinero y otra diferente es saber conservarlo…

La complejidad esta en el hecho de que, aunque las ganancias puedan ser tangibles, la codicia y el optimismo excesivo pueden nublar el juicio del inversionista. A esto se suma la volatilidad del mercado, que puede ser tan beneficiosa como perjudicial en cuestión de momentos. La salida oportuna de una inversión requiere de análisis, control emocional y, sobre todo, disciplina. Pero para construir esta disciplina, debe haber un plan previo de salida y te lo explico con un ejemplo:

Para ilustrar la importancia de una salida estratégica, consideremos el ejemplo de un inversionista que adquiere acciones de Nvidia. La empresa ha tenido un fuerte crecimiento en los últimos dos años y, siguiendo las tendencias del mercado, se espera que continúe su expansión. El inversionista establece que un retorno del 20% anual sobre la inversión sería suficiente para cumplir sus objetivos financieros.

Después de un año de haber realizado la inversión, la empresa reporta un incremento en sus ingresos y las acciones suben un 25%. En este punto, el inversionista podría sentir la tentación de mantenerse en la inversión, anticipando mayores ganancias. Sin embargo, el análisis de mercado sugiere que la empresa está sobrevalorada y que el sector tecnológico podría estar cerca de alcanzar su pico. ¿Qué debería hacer en ese momento?

Si el inversionista se apega a su plan original y decide vender las acciones, aseguraría sus ganancias y evitaría posibles pérdidas por una corrección del mercado. Por otro lado, si decide mantener su inversión con la esperanza de obtener mayores retornos, podría enfrentarse a una caída imprevista en el precio de las acciones si el mercado cambia su tendencia.

Hay diversas estrategias que pueden ayudar a los inversionistas a decidir cuándo retirarse, y las mas comunes son las siguientes (aunque no todas aplican para cualquier tipo de inversión o vehículo)

Establecer Objetivos de Ganancia y Pérdida: Antes de invertir, debes definir claramente los objetivos de ganancia y los límites de pérdida. Al alcanzar cualquiera de estos niveles, el inversionista debería considerar salir de la inversión.

Stop Loss y Take Profit: Son órdenes automáticas que se pueden configurar para cerrar una posición cuando se alcanza un cierto nivel de precio, asegurando ganancias o limitando pérdidas. (aplica para acciones, opciones, crypto, futuros, etc)

Rebalanceo de portafolio: Consiste en ajustar la proporción de diferentes tipos de inversiones en un portafolio para mantener un nivel de riesgo deseado. Si una inversión ha crecido significativamente y altera el equilibrio del portafolio, podría ser un indicador para vender.

En el mundo financiero existe un dicho que aunque suena obvio, en momentos de euforia en el mercado pareciera que todos lo olvidaran que dice: Nunca te olvides de tomar ganancias y liberar el riesgo de tus posiciones. Esto aplica en todo, incluso en los negocios convencionales en los cuales yo estoy en contra de las políticas de 100% reinversión, pero eso es un tema para otro análisis.

Análisis Fundamental: Evaluar continuamente la salud financiera de la inversión. Si los fundamentos que motivaron la compra o inversión inicial cambian, puede ser momento de considerar la venta. ¿Te suena a algún negocio tradicional?

Análisis Técnico: Utilizar indicadores técnicos y de gráficos para identificar señales de salida para posiciones en acciones, divisas, materias primas, etc. Eventos del Mercado: Estar atento a eventos que puedan afectar la inversión, como cambios en la política económica, fluctuaciones de la moneda, etc.

La clave del éxito en las inversiones radica en la capacidad para adherirse a un plan estratégico preestablecido, evitando así las trampas de la emocionalidad y la especulación.

La disciplina para reconocer y actuar cuando se han alcanzado los objetivos de ganancia o se ha llegado al límite de pérdida es lo que diferencia a los inversionistas exitosos de aquellos que dependen de la suerte. Las inversiones deben ser monitoreadas y gestionadas activamente, teniendo en cuenta no sólo el rendimiento potencial, sino también el contexto económico global y el horizonte temporal de la inversión, teniendo en cuenta siempre los posibles escenarios adversos.

Es por todo esto que la salida oportuna de una inversión no sólo protege las ganancias ya obtenidas, sino que también prepara el terreno para futuras oportunidades de inversión, evitando la posibilidad de pérdidas devastadoras. Así como se cuida una planta para que crezca y de frutos, las inversiones deben ser igualmente cuidadas para asegurar que los frutos financieros se recojan en el mejor momento posible.

Y tú, ¿Cómo planeas el momento de salida de tus inversiones?

Diego Alcalá, director operaciones Comprando América